Las «Escuelas» de Islares son actualmente un consultorio médico para los vecinos de Islares. En este edificio se formaron varias generaciones de islareños que realizaban los primeros años de escolaridad.
En 1897 Eladio Laredo, arquitecto castreño procedió a evaluar el estado ruinoso del edificio, promoviendo su rehabilitación.
El edificio constaba de dos aulas para separar los niños de las niñas.
La disminución de niños en Islares y la normativa escolar por edades implantada hizo que se cerrara el recinto y se trasladasen los estudiantes a los centros de educación en Castro.
Diversas remodelaciones del entorno han convertido la zona de «las Escuelas» en un parque de recreo con columpios.